Ángel Encarnación Bautista, el chofer que conmocionó a Las Yayas, se entrego
Ángel Encarnación Bautista, el conductor del camión que arrolló a un grupo de personas en las afueras de un bar en Bastidas, una comunidad perteneciente al distrito municipal de Villarpando en Las Yayas, provincia de Azua, se entregó voluntariamente a las autoridades. El accidente, que dejó una profunda huella en la comunidad, ocurrió cuando Encarnación Bautista, un hombre de fe evangélica y originario de Hondo Valle en la provincia Elías Piña, perdió el control del vehículo, impactando brutalmente contra la multitud.
El suceso tuvo lugar en una tranquila noche que se transformó en caos y tragedia. Las primeras informaciones indican que Encarnación Bautista, conocido por su carácter pacífico y devoción religiosa, estaba al volante del camión en un aparente descuido que resultó en un desenlace fatal. Las autoridades locales, junto con los vecinos de la comunidad, expresaron su asombro ante lo sucedido, ya que nunca imaginaron que una persona tan comprometida con su fe pudiera estar involucrada en un incidente de esta magnitud.
Tras el impacto, el pánico se apoderó del lugar, y rápidamente los heridos fueron socorridos por los presentes y trasladados a centros de salud cercanos. Encarnación Bautista, consciente de la gravedad de sus acciones, tomó la decisión de entregarse, demostrando con ello su intención de cooperar con la justicia y afrontar las repercusiones legales que esto conlleva.
Este trágico episodio ha desatado una serie de interrogantes en la comunidad, donde se debate cómo un evento tan catastrófico pudo ocurrir en un lugar normalmente tranquilo. Mientras las investigaciones avanzan, los familiares de las víctimas y los habitantes de Bastidas esperan que se haga justicia, pero también buscan respuestas y consuelo en medio del dolor.
